lunes, 13 de abril de 2015

MANUAL DE SIALOTERAPIA

 MANUAL DE SIALOTERAPIA. 
Este libro tiene una lista de la A a la Z de las enfermedades que se pueden curar con la aplicación de la saliva, tales como acné anginas artritis cáncer dolores de todo tipo epilepsia (Plinio dijo que se cura. Yo el autor del libro he visto al menos 4 casos de epilepsia curados) fístulas gangrena hipo mareos parálisis quistes raspones tumores úlceras várices zóster. 
Aquí se puede encontrar gratuitamente:
 http://www.universalnews.net/es/otra-realidad/conspiraciones-sombra/?n=4162-manual-de-sialoterapia-curacion-a-traves-de-la-saliva-por-el-doctor-andres-amado-zuno

domingo, 29 de marzo de 2009

Saliva curativa. Sialoterapia.

Esta es parte del índice de un libro sobre la saliva curativa. Más informes en andreszuno@gmail.com

"Cuando haya leído este libro, ud. verá que los aspectos que se encuentran y/o conectan con la saliva son de una riqueza enorme, profunda, vital, admirable y única.
Sirve para casi toda dolencia, desde un pequeño golpe, hasta para ¡la eterna juventud y la inmortalidad!, de acuerdo a estudiosos de oriente, y no distingue razas, credos, profesiones, estratos sociales...nada. Y fue el primer antibiótico usado.
La han empleado reyes, gente del pueblo, hombres místicos, sabios. (Aristóteles, Cristo, Kant, Celso, Galeno, Mahoma, Paracelso, etc.) Todos los humanos, pues, e incluso los animales.
Se ha usado y hablado de ella en las casas de los humildes, en las universidades, en los templos. Los libros sagrados la mencionan: La Biblia; El Corán; El Popol Vuh, etc., hasta ha sido usada para crear dioses, según el Libro de los Muertos, de Egipto.
También se le ha equiparado a la sangre y al semen (sumerios: “Vehículo del soplo de la vida”[1],)
¿Durante cuánto tiempo se ha usado? Ayer, hoy, siempre. Supera la limitación temporal de la moda pasajera.
Actúa químicamente a nivel celular y reactivamente en el S. N., acupunturalmente, y tal vez homeopáticamente. (Hay similitud)
Por todo esto, se merece el máximo respeto, el interés de la gente y los investigadores y su utilidad debe ser divulgada.
LO QUE HEMOS VISTO DE LA SALIVA CURATIVA.
Lo más probable es que casi todos hayamos sido testigos de cómo los perros y los gatos se curan heridas con tan sólo lamérselas, no únicamente ellos a sí mismos, sino unos a los otros. Nosotros mismos lo hacemos, como ellos, instintivamente. En mis investigaciones he encontrado fotografías de madres simios, gorilas, chimpancés, lamiendo a sus bebés para limpiarles la cara. Sin duda les asean todo el cuerpo, como hacen perros y gatos. Menciono a los simios por ser lo más parecido a nosotros y porque, lo más asombroso, también madres humanas les limpian las caras y más a sus bebés, aunque éstas generalmente usan toallas humedecidas con la medicinal saliva. Y digo “generalmente usan toallas” porque también les limpian los ojos lagañosos con su propia lengua, como luego veremos los testimonios de varias personas.
Los informes que he recibido personalmente así como los experimentados por mí son abundantes y aumentan casi cada día, pero los más numerosos los he obtenido mediante Internet. Todos ellos han sido lo que me han impulsado a investigar: han originado y alimentado mi sed de saber más y, posteriormente, hacer público lo que encuentro para beneficio del mayor número de personas. Mi mayor anhelo es que la gente sane.
ESTA ES UNA OBRA COLECTIVA, DE LA GENTE, DE INVESTIGADORES, DEL AUTOR.
Además, el hecho de que hayan sido innumerables testimonios los que componen una buena parte de este libro, le da el carácter de obra colectiva, no sólo de “el autor”. Los testimonios han sido tan abundantes, unos recabados personalmente, otros mediante Internet, que puedo ver que algunos ya se me han escapado o no tengo la autorización para exponerlos.
No han sido pocas las críticas que he recibido por el tema que investigo: “la saliva curativa”… ¡Qué es eso!, han dicho algunos; una locura, opinan otros. Pero una de las sorpresas más grandes para mí ha sido encontrar que verdaderos gigantes de la medicina hablan del tema: Aristóteles, Celso, Galeno, Hipócrates, Maimónides, Paracelso, Plinio, entre otros, decenas, y que en prácticamente en todos los libros sagrados se menciona. Los dioses la han usado. Otra sorpresa ha sido descubrir que la mayoría de la gente la ha usado y la usa y recuerda a madres y abuelas aplicándola, estas últimas en particular. No estoy sólo en esta “locura”.
MI INTERÉS INICIAL Y MI EXPERIENCIA CURATIVA MEDIANTE EL USO DE SALIVA
Mi interés por los efectos curativos de la saliva se inició en los años ochenta. Haciendo deporte en Cuernavaca, Morelos, México, con un querido amigo mío de esa ciudad, el Arq. Elías Pérez Tenorio[2], me di un golpe y me sugirió me pusiera saliva; “se te va a calmar el dolor y ni morete se te hará” dijo. Y así fue. Desde entonces la he usado para esos golpes que se tienen de vez en cuando. En múltiples ocasiones he visto a señoras sufriendo porque sus hijitos se cayeron y se lastimaron, algunas veces fuertemente, y nada podían hacer para calmar el dolor y el sufrimiento de los niños aquellos. “Póngale saliva, señora” les decía, casi siempre sin resultado alguno, las personas aquellas manifestando una incredulidad total, avasallados como estamos por la publicidad y el imperio de la medicina oficial y sobre todo por la tecnología médica asombrosa que existe. Pero después de un rato algunas me han hecho caso y... ¡santo remedio! Los niños inmediatamente dejan de llorar, se les calma el dolor.
SALIVA PARA UN DESGARRE MUSCULAR.
Pero una vez me hice un desgarre en la pantorrilla derecha y no podía subir y bajar escaleras normalmente. Renqueaba. Y después de dos o tres días decidí ponerme saliva, antes no porque yo suponía que solamente servía para contusiones, golpes, y ¡o sorpresa! también tuvo efectos pese a lo diferente de la lesión. Debo decir que ya había probado lo típico de homeopatía y acupuntura, con resultados pobres; Árnica tomada, en pomada, etc. Esta experiencia aumentó notablemente mi interés en las posibilidades curativas de la saliva. El campo de acción de la misma se ampliaba porque no se trataba de algo superficial, de la piel o un poco dentro. Este libro es el resultado de años de observaciones, investigaciones, interpretaciones de qué cura y cómo es que se dan las curaciones.
UNA VIDA CON MENOS DOLORES, MOLESTIAS Y MENOS SUFRIMIENTOS: MÁS RICA.
Aprovechando las posibilidades terapéuticas, curativas, de la aplicación de la saliva la calidad de vida mejora notablemente, pues se puede aplicar en cualquier momento prácticamente evitando las molestias que acarrean los dolores y algunas enfermedades. A veces me atacan dolores cuando estoy acostado. No tengo que levantarme a tomar una aspirina o cualquier otro producto químico que además me daña en alguna medida. Tengo la medicina “a pedir de boca...” Y no solamente dolores se controlan, sino algunas enfermedades: tos, amigdalitis, migrañas, etc., etc., etc.
EL REENCUENTRO DE ALGO VITAL, DE SIEMPRE, NATURAL.
Mi compañera me hace notar que un aspecto muy importante de este libro es que se trata del encuentro-reencuentro de algo que es y ha sido, más esto último, algo vital, de todos los días e inherente a nuestra naturaleza : la curación con saliva. Podemos ver que no depende de la moda, de la influencia de un gigante de la medicina o de algún otro tipo de circunstancia transitoria. Por ello, no podrá ser catalogada con las limitaciones de un nombre. Jamás será hipocrática, paracelsiana, hahnemanniana, virchowiana, etc. No; es consustancial a la naturaleza, incluso más allá de la humana. Los prehomínidos la usaban, como los orangutanes, los chimpancés, etc., la usan hoy. Los animales no tienen mucho de dónde escoger para curarse. Hay quien me dice que si dios les dio a los animales tan buena medicina, porqué no a nosotros, los animales humanos, y que debemos usarla. También habemos quienes vemos que se trata de algo consustancial a la evolución.
LA SALIVA DE LOS PERROS.
Los informes sobre la capacidad curativa de la saliva de los perros son de desatacar en cantidad y calidad. Curaciones de enfermedades casi siempre mortales como la distrofia de Sudeck, el cáncer, etc. están reportadas, así como otras disfunciones de la más variada clase: neumonía, dolores de cabeza, micosis, etc. En la Roma antigua hasta se les hacían templos donde la gente iba a que la curara. Hacer que los ojos de los responsables de la salud de la gente voltee a verlos como una posibilidad real de apoyo en la terapia, la curación de las personas, es también un objetivo de la publicación de este libro. Y sobre todo que la gente sepa de esa posibilidad y la aproveche.

INTENTOS DE EXPLICACIÓN DEL PORQUÉ CURA.
Soy autor de un libro que intenta explicar las bases científicas de la homeopatía y la acupuntura. Se llama “Homeopatía e informática” (En andreszuno.com se puede ver y en el anexo #1 se encuentran comentarios sobre el mismo, de numerosos autores, algunos científicos afamados en el mundo, los cuales avalan mis observaciones y las califican de acertadas, científicamente verdaderas). Sostengo, y en ese libro explico con detalle mis teorías, que la influencia de los medios homeopáticos y los acupunturales curan porque influyen en la computadora-cerebro, directamente, y en todo lo demás del organismo, indirectamente, lo mismo que la saliva, tema de este libro.
Tenemos experiencias de apenas una sola vez, por lo cual se hace evidente que falta mucho por hacer, pero se establece la presunción de la posibilidad real de la curación, como en los casos de Síndrome de Miembro Fantasma, gota e hipertensión arterial.
(Profundización de la explicación teórica científica, en los capítulos segundo y tercero)


(Fin de la introducción)
[1] http://www.aeu.es/aeu_webs/historia/ArchEspUrol/LVII(9)876-882.pdf
[2] A mediados de enero, 2009, pude hablar con Elías vía telefónica, por primera vez en más de diez años. Me hizo notar que las heridas de los perros cicatrizan tan bien cuando dicha lesión está al alcance de la boca del animal que ni cicatriz se les hace. La saliva de los canes esterilizada podría ser utilizada para mejorar la cicatrización de las heridas en nosotros los humanos. Vale la pena experimentarlo.